De Roma a Berlín: La protestantización de la iglesia Católica

Este libro es "obligado" a todo aquel que quiera entender la situación crítica de la Iglesia en diversos campos que le competen. ¿Por qué hemos llegado a esto? ¿Por qué las verdades fundamentales reveladas desde hace milenios quedan ahora en tela de juicio? ¿Por qué "huele" a protestante la Iglesia Católica? El P. Calvo Zarraute desvela muchos de las causas originales históricas que desembocaron en la actual crisis de la Iglesia. Extraordinariamente bien escrito y fundamentado, recomiendo ampliamente su lectura.

El error es una enfermedad...en este caso vayamos a los depósitos de la fé católica, estudiemos y generemos el cambió...Dios al centro...

Para cualquier español que necesite conocer la deriva religiosa, filosófica, moral e histórica de una nación tan rica y bendecida como España; este y todos los libros del padre Gabriel son imprescindibles. Amén de que en todos ellos, se hace mención a bibliografía muy interesante que también se ha de consultar. Ser español sin conocer adecuadamente su historia y su grandeza basada en su religiosidad, es no conocerse a sí mismo.

No solamente es un diagnóstico crudo de la problemática actual que padece la Iglesia Católica, sino que ofrece un recorrido a través de diversas causas y sus respectivas consecuencias. Es una llamada de atención para actuar frente a la crisis actual. ¿Qué sería de la Iglesia Católica si esta jamás analizara su estado de salud presente, su contexto y las causas que le aquejan?, Pero sobre todo, ¿qué sería si jamás recibiéramos un balde de agua fría para intentar despertar a los dormidos o seducidos por las ideologías perversas, filosofías perniciosas, y teologías ajenas, ¿de qué otra forma llamar la atención a una Iglesia que necesita urgentemente despertar de una especie de secuestro, y volver a mover su voluntad hacia el bien que Dios siempre quiso en la gran misión a la que fue llamada en un principio?.Eso es lo que el padre Gabriel Calvo Zarraute intenta en este libro. Un libro muy actual.Hay un tiempo para sembrar, un tiempo para esperar, un tiempo para tolerar, un tiempo para cosechar, un tiempo para celebrar, un tiempo para llorar, pero también un tiempo para llamar la atención.No obstante, la Iglesia Católica no tiene tiempo para ser incongruente y protestante. Es preferible protestar contra el Protestantismo, mas no protestar contra el depósito de la fe.¡Ánimo, pues nuestro señor Jesucristo fue el primero en vencer!